Es una especie de vicio: así lo denominan casi todos los usuarios de este novedoso sistema de difusión de música por Internet. Y lo mejor, es que hasta va aprendiendo de tus gustos, y conforma la radio que vos querés escuchar.
El servicio de Pandora es sencillo y ágil. Vos entrás a la página, y se abre una caja, en la cual tenés que registrarte, mediante el simple tramite de brindar una dirección de email valida, e inventar una contraseña. El correo electrónico que uses para registrarte, será en adelante tu nombre de usuario. Te pide tu año de nacimiento, sólo con fines estadísticos, y si sos varón o mujer.
Una vez dentro del sistema, tenés que “crear” tu estación de radio. Te pide que ingreses el nombre de un intérprete o banda, o de un tema musical, para comenzar a conocer tu gusto. A partir de ahí, te sugiere que escuches el primer tema que encontró de acuerdo a tu selección.
Además, lo bueno es que no sólo te hace escuchar música de ese intérprete, sino también de bandas o solistas que tienen estilos similares. Esto hace que puedas ampliar tu conocimiento, a partir de estos hallazgos.
Pero cuidado, si vos considerás que el tema no te gusta, lo quita de tu “estación de radio” y sigue haciéndote ofertas. Por ejemplo, te cuento una selección: cuando elegí “Yes” como grupo, me hizo escuchar un primer tema de esta banda. Y luego me ofreció un tema de “Saga”, otro de “Styx”, luego otro de “Asia” y más tarde uno de “Journey”, todos enmarcados en una similar corriente musical.
Y lo bueno es que es un servicio gratuito, que se mantiene con publicidad. Hasta hace poco tiempo, era un sistema de pago por suscripción, pero volvieron atrás con la idea de cobrar, dado que en Internet funciona mejor el sistema con publicidad que el pago.
La calidad del sonido es impecable, el manejo es muy simple, y es la mejor manera de tener buena música todo el día, mientras trabajas con tu computadora, en un sistema de radio “a la carta”. Y –como dicen los creadores de Pandora- “la misión es que descubras la nueva música que pronto elegirás”.
El servicio de Pandora es sencillo y ágil. Vos entrás a la página, y se abre una caja, en la cual tenés que registrarte, mediante el simple tramite de brindar una dirección de email valida, e inventar una contraseña. El correo electrónico que uses para registrarte, será en adelante tu nombre de usuario. Te pide tu año de nacimiento, sólo con fines estadísticos, y si sos varón o mujer.
No sólo te hace escuchar música de ese intérprete, sino también de bandas o solistas que tienen estilos similares
Una vez dentro del sistema, tenés que “crear” tu estación de radio. Te pide que ingreses el nombre de un intérprete o banda, o de un tema musical, para comenzar a conocer tu gusto. A partir de ahí, te sugiere que escuches el primer tema que encontró de acuerdo a tu selección.
Además, lo bueno es que no sólo te hace escuchar música de ese intérprete, sino también de bandas o solistas que tienen estilos similares. Esto hace que puedas ampliar tu conocimiento, a partir de estos hallazgos.
Pero cuidado, si vos considerás que el tema no te gusta, lo quita de tu “estación de radio” y sigue haciéndote ofertas. Por ejemplo, te cuento una selección: cuando elegí “Yes” como grupo, me hizo escuchar un primer tema de esta banda. Y luego me ofreció un tema de “Saga”, otro de “Styx”, luego otro de “Asia” y más tarde uno de “Journey”, todos enmarcados en una similar corriente musical.
Lo bueno es que es un servicio gratuito, que se mantiene con publicidad.
Y lo bueno es que es un servicio gratuito, que se mantiene con publicidad. Hasta hace poco tiempo, era un sistema de pago por suscripción, pero volvieron atrás con la idea de cobrar, dado que en Internet funciona mejor el sistema con publicidad que el pago.
La calidad del sonido es impecable, el manejo es muy simple, y es la mejor manera de tener buena música todo el día, mientras trabajas con tu computadora, en un sistema de radio “a la carta”. Y –como dicen los creadores de Pandora- “la misión es que descubras la nueva música que pronto elegirás”.
